UN VIAJE CINEMATOGRÁFICO A TRAVÉS DEL TIEMPO
Si pasean por el
barrio de “Las vistillas”, concretamente en la calle Balien, cruzando el puente
de y antes de llegar a la
Iglesia de San Francisco El Grande, encontraran “Casablanca”. Entrar en esta
tienda es aprenderlo todo sobre cine en Madrid, gracias al trabajo de Pepe y
Llopis que albergan este lugar desde hace 25 años. Carteles de cine, programas
de mano, fotos de artistas, y un encanto muy especial por su olor, parecido al
de aquellos cines de los años 70 y 80.
Escribo encanto
especial, porque entrar en “Casablanca” es como sentarse en la maquina del
tiempo de Rod Tailor, y viajar a través de sus objetos a momentos inolvidables
de nuestras vidas. Carátulas de dvd, de vhs, o bien una edición en vinilo de la
banda sonora de Ben Hur son algunos de ellos. Mi último paseo por esta casa, me
sirvió para remirar fotos de Ava Gadner, Paco Rabal, tener entre mis manos
entradas de sesión continua o para revisar carteles que tenía olvidados. Las
conversaciones que se mantienen son cinematográficas cien por cien.
Hablamos de la
desaparición de la gran dama de la escena Mari Carrillo (foto en mano), de José
Luis López Vázquez, de Paul Naschy, y siempre acabamos contando anécdotas
sucedidas en la tienda. “Casablanca” es un punto de encuentro de cineastas.
Igual te encuentras con el grandísimo actor Jesús Guzmán, que ves al legendario
Ramos, editor de libros de cine, abriendo sus portafolios para mostrarte sus
últimas publicaciones, por cierto, el libro de los programas de mano escrito
por el mismo Bienvenido Llopis es una joya. Surgen nombres como Alfredo Landa,
Alfredo Matas, José Luis Garci...
Tiene
estanterías repletas de música de cine, el archivo cinematográfico en papel
Kodak más grande la capital, y otro valor añadido de “Casablanca”, los bajos
del local. Esta parte de la tienda, alberga cerca de quinientos carteles de
cine originales de la época. Es sin duda un túnel en el tiempo y un lugar donde
perderse una tarde o una mañana tranquila, y disfrutar de imágenes o personajes
cinematográficos que están en nuestra retina pero que casi habíamos
olvidado.
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